Caída libre

Olé

Independiente no para de retroceder casilleros y el objetivo de los escasos 25 puntos se acercan más a la utopía que a la realidad. Esta vez el rojo cayó 2 a 1 frente a Ñewell´s Old Boys de Rosario. Pese a que el conjunto de Cristian Díaz arrancó ganando, los viejos errores volvieron a decir presente y la "lepra" dio vuelta el partido.


Un equipo que no entiende de finales es este Independiente. Pese a que en la primera etapa el equipo se asoció bien en ataque, el resto del encuentro volvió a mostrar un equipo sin ideas de juego, defendiendo y atacando mal. El rojo no pudo traerse ni siquiera un punto de un partido que ya desde la previa se planteaba como una verdadera final. Aunque Farías (luego de un centro de Ferreyra) puso el 1 a 0 para los de Avellaneda, la alegría fue fugaz ya que los rosarinos consiguieron el empate con un tanto de Pérez antes de finalizar la primer etapa.

Pero esa no era la única mala noticia, Adrián Gabbarini, con un fuerte dolor en la rodilla (luego del tanto de Ñewell´s) tuvo que salir de la cancha y en su lugar, para el segundo tiempo, ingresó Hilario Navarro. La segunda mitad fue un deja vú de partidos anteriores, una defensa desorganizada y un mediocampo errático sumados a una delantera que tenía pocas chances y las desperdiciaba.

Pero lo peor llegó casi al final del encuentro cuando Aquino liquidó a Navarro con una media vuelta en solitario en el área. Independiente no pudo quebrar la valla de Peratta tampoco con los ingresos de Patricio Vidal y Facundo Parra.

El panorama es muy complicado e Independiente comienza a cerrar uno de los peores campeonatos de su historia (sólo una victoria de visitante vs Boca) y con la derrota de anoche llega al quinto partido sin conocer la victoria (sacó un punto de 15). Futuro incierto.